jueves, 3 de enero de 2008

Un poco de sol protegería del linfoma no Hodgkin


NUEVA YORK (Reuters Health) - La exposición recreativa al sol ayudaría a prevenir un tipo de cáncer de sangre que afecta a los nódulos linfáticos y se denomina linfoma no Hodgkin (LNH), indicó una revisión de 10 estudios.

"Estos resultados (...) sugieren que si la exposición al sol protege de LNH, un patrón intermitente de exposición al sol brindaría la mayor protección", escribió en International Journal of Cancer el equipo dirigido por la doctora Anne Kricker, de la University of Sydney, en Australia.

La exposición al sol aumenta la producción de vitamina D en la piel, lo que según los autores causaría su efecto anticancerígeno.

Algunos estudios hallaron que la exposición al sol aumenta el riesgo de LNH porque las personas con cáncer de piel tienen más riesgo de sufrir la enfermedad y que las tasas de melanoma aumentaron junto con las de LNH.

Pero cuatro estudios realizado entre el 2004 y el 2007 sobre esa relación hallaron que la exposición al sol protegía de LNH; un quinto estudio, sólo sobre mujeres, demostró un aumento del riesgo de LNH con la exposición al sol.

Para analizar sistemáticamente el riesgo de LNH y la exposición al sol, el equipo revisó los resultados de esos cinco estudios y otros cinco más de un grupo científico internacional especializado en linfoma.

Las investigaciones incluyeron a un total de 8.243 pacientes con LNH y a 9.697 personas sin la enfermedad.

El equipo halló que la exposición recreativa al sol entre los 18 y los 40 años, como así también durante los 10 años previos al diagnóstico de LNH, disminuía el riesgo de desarrollar la dolencia.

Los autores definieron la exposición recreativa al sol como la cantidad de horas al sol en los días no laborales.

No se observó una relación entre la exposición al sol por trabajo y el riesgo de LNH. La exposición total al sol estuvo asociada con una disminución del riesgo, aunque no de manera estadísticamente significativa.

La exposición al sol hace que la piel produzca vitamina D, lo que para el equipo explicaría por qué el sol puede proteger de LNH.

Sin embargo, otros factores podrían influir en esa relación, como el ejercicio, dado que las personas con mayor exposición recreativa al sol serían más activas.

El equipo sostiene que nuevos estudios que comparen la cantidad de vitamina D que las personas tienen en sangre y el riesgo de LNH "darían una respuesta más precisa" sobre las propiedades protectoras de la luz solar.

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